Salmo 95

Venite, exultemus
6
Vengan, adoremos y postrémonos; *
arrodillémonos delante del Señor nuestro Hacedor;
7
Porque él es nuestro Dios;
nosotros el pueblo de su dehesa, y ovejas de su mano. *
¡Ojalá escuchen hoy su voz!
8
No endurezcan su corazón,
como en Meribá, y en el día de Masá en el desierto, *
donde me tentaron sus antepasados.
9
Me pusieron a prueba, *
aunque habían visto mis obras.
10
Durante cuarenta años aborrecí aquella generación, y dije: *
“Es un pueblo que divaga de corazón;
no reconoce mis caminos”.
11
Por tanto, juré en mi furor: *
“No entrarán en mi reposo”.