Salmo 18

Parte II

Et retribuet mihi
21
El Señor me ha premiado conforme a mi justicia; *
conforme a la limpieza de mis manos me ha recompensado;
22
Porque yo he guardado los caminos del Señor, *
y no me aparté impíamente de mi Dios.
23
Pues todos sus juicios estuvieron delante de mí, *
y no me he apartado de sus estatutos.
24
Fui íntegro para con él, *
y me he apartado de iniquidad;
25
Por lo cual me ha recompensado el Señor
conforme a mi justicia, *
conforme a la limpieza de mis manos delante de su vista.
26
Con el fiel te mostrarás fiel, *
con el íntegro tú eres íntegro.
27
Con el sincero tú eres sincero; *
pero con el astuto tú eres sagaz.
28
Tú salvarás al pueblo humilde, *
y humillarás los ojos altivos.
29
Oh Señor, tú eres mi lámpara; *
Dios mío, tú alumbras mis tinieblas.
30
Contigo abatiré cualquier baluarte; *
con mi Dios puedo escalar cualquier muralla.
31
Dios, perfecto su camino;
acrisoladas las palabras del Señor; *
escudo a todos los que en él esperan;
32
Porque ¿quién es Dios sino sólo el Señor? *
¿Qué Roca hay fuera de nuestro Dios?
33
Dios es el que me inviste de fuerza, *
quien hace perfecto mi camino.
34
El hace mis pies como pies de ciervos, *
y me hace estar firme sobre las alturas.
35
El adiestra mis manos para la batalla, *
y mis brazos para tensar un arco de bronce.
36
Me diste asimismo el escudo de tu victoria; *
tu diestra me sustentó,
y tu benignidad me ha engrandecido.
37
Ensanchaste mis pasos debajo de mí, *
y no flaquearon mis tobillos.
38
Perseguí a mis enemigos, y los alcancé, *
y no volví hasta acabarlos.
39
Los herí de modo que no se levantasen; *
cayeron debajo de mis pies.
40
Me investiste de fuerzas para la pelea; *
has humillado a mis enemigos debajo de mí;
has hecho que mis enemigos me vuelvan las espaldas.
41
Destruí a los que me aborrecían;
clamaron, y no hubo quien los salvase; *
aun al Señor, pero no los oyó.
42
Los molí como polvo delante del viento; *
los pisoteé como lodo de las calles.
43
Me has librado de las contiendas del pueblo; *
me has hecho cabeza de las naciones.
44
Pueblo que yo no conocía me sirvió;
al oír de mí, me obedecieron; *
extranjeros se acobardaron delante de mí.
45
Los extranjeros flaquearon, *
y salieron temblando de sus encierros.
46
¡Viva el Señor! ¡Bendita sea mi Roca! *
¡Ensalzado sea el Dios de mi salvación!
47
Es el Dios que me dio el desquite, *
y sometió pueblos debajo de mí;
48
El que me libra de mis enemigos,
y aun me eleva sobre los que se levantan contra mí; *
me libraste del varón violento.
49
Por tanto yo te confesaré entre las naciones, oh Señor, *
y cantaré himnos a tu Nombre.
50
Grandes triunfos da a su rey; *
hace misericordia a su ungido,
a David y a su descendencia para siempre.